Antonio Quilis Morales, fundador del laboratorio, fue desde 1975 hasta su jubilación catedrático de Lengua Española en la UNED, donde, además de ejercer un período como Decano de la Facultad de Filología, dirigió durante muchos años el Departamento de Lengua Española y Lingüística General; en él continuó como emérito los pocos meses transcurridos desde la jubilación hasta su muerte. 

Entre otras muchas, quizá la mayor pasión lingüística del profesor Quilis fuera el conocimiento y la descripción de las variedades dialectales del español. Desde 1985 fue codirector, junto a Manuel Alvar, del Atlas Lingüístico de Hispanoamérica, y desde 1992, del Atlas Lingüístico Nacional del Ecuador, junto a Celia Casado.

Fruto de ese interés fue su "vida de dialectólogo", con incontables viajes a todos los rincones del mundo hispánico, cuyo resultado son miles de horas de grabaciones, un material de enorme riqueza, como reflejan sus estudios de referencia sobre el español de Filipinas, Guinea Ecuatorial y Ecuador, así como numerosos artículos, tanto sobre hablas de España (Albacete, Canarias, Ceuta y Melilla) como de América (Puerto Rico, Chile, Panamá, Nicaragua, Bolivia, o Brasil, Belice y Estados Unidos). 

El profesor Quilis contribuyó de manera decisiva al desarrollo de la fonética acústica y la dialectología del español durante la segunda mitad del siglo XX, tal como lo atestiguan los numerosos homenajes y reconocimientos que se le dedicaron tras su fallecimiento:

Su amplio legado incluye una larga lista de publicaciones y una gran cantidad de material sonoro, tanto docente como de investigación.